Mírate atentamente a los ojos en un espejo. ¿Una de tus pupilas se ve notablemente más grande o más pequeña que la otra? Si la respuesta es sí, es posible que tenga anisocoria.
La anisocoria ocurre cuando una persona tiene pupilas de tamaño desigual. Una de las pupilas puede ser más grande de lo normal o más pequeña de lo normal, lo que da como resultado pupilas de diferentes tamaños. La pupila en su forma más dilatada se conoce como midriasis, y la forma contraída se llama miosis, y esta condición puede ser inofensiva o el síntoma de algún problema importante.
El diferente tamaño de las pupilas puede hacer que el color de los dos ojos se vea diferente entre sí, pero en realidad es solo porque el color aparece más en uno de ellos. Esta confusión hizo que mucha gente creyera que el icónico cantante David Bowie tenía heterocromía, que se caracteriza cuando una persona tiene un ojo de cada color, y en realidad tiene anisocoria, condición que afecta al 20% de la población.
La verdadera historia sobre los ojos de David Bowie
Cuando David Bowie tenía 15 años, él y su amigo George Underwood se pelearon por una chica que les gustaba a ambos. Durante la pelea, David Bowie recibió un puñetazo en el lado izquierdo de la cara y su córnea resultó herida por la uña de Underwood.
El trauma y la fuerza del golpe dañaron el iris de Bowie, causando una parálisis completa del músculo del iris. A partir de entonces, su ojo izquierdo permaneció dilatado y ya no respondió a los estímulos lumínicos, mientras que su ojo derecho permaneció normal.
Entonces, al contrario de lo que mucha gente pensaba, David Bowie no tenía dos ojos de diferentes colores. Ambos ojos eran azules, pero, como su pupila era mucho más grande en el ojo izquierdo, se veía mucho más oscura que el ojo derecho, que mostraba más azul.
¿Y cuáles son las otras causas de la anisocoria?
Muchos casos de anisocoria son normales y no tienen antecedentes de trauma o patología relacionada. Generalmente, estos casos de anisocoria en los que una pupila es más grande que la otra en menos de 1.0 mm sin una causa aparente se denominan anisocoria simple, anisocoria benigna o anisocoria fisiológica.
En un estudio sobre la prevalencia de la anisocoria, los investigadores fotografiaron las pupilas de 128 individuos normales, con poca luz durante cinco días consecutivos. Las fotografías se tomaron todos los días por la mañana y por la tarde.
Entre estos individuos, el 41% tenía una anisocoria de 0,4 mm o más en algún momento del estudio. Y en cada sesión de fotos, un número más o menos constante del 19% de las personas presentó un caso de anisocoria leve.
Otra investigación también sugiere que aproximadamente el 20% de la población general tiene anisocoria benigna leve. Además, algunos animales, como los gatos, también pueden tener esta afección.
Sin embargo, la anisocoria significativa, que ocurre cuando una pupila es más grande que la otra en más de 1.0 mm, puede tener varias causas, que van desde un traumatismo ocular, como fue el caso de David Bowie, hasta problemas con la medicación. Las principales causas son:
Anisocoria mecánica: Además del trauma en el iris, también puede ser causado por una cirugía ocular o una reacción inflamatoria.
Ciertos medicamentos para los ojos: Por ejemplo, las gotas oftálmicas de pilocarpina que se usan para tratar el glaucoma pueden hacer que la pupila del ojo tratado sea más pequeña que la de la otra pupila.
Inflamación del iris: La hinchazón del iris puede provocar anisocoria, que suele ir acompañada de dolor en los ojos.
Pupila tónica de Adie: Esta condición benigna hace que una pupila sea visiblemente más grande que la otra y deja de responder a la luz. En la mayoría de los casos, se desconoce la causa de la pupila de Adie, pero puede estar asociada con un traumatismo ocular o una infección.
Problemas neurológicos: Varias afecciones que dañan los nervios del cerebro o la médula espinal pueden causar anisocoria. Uno de los más importantes es el síndrome de Horner.
Siempre tan genuino David Bowie
Que buena explicación sobre la Anisocoria, esta condición puede ser inofensiva o el síntoma de algún problema importante, por lo que si vemos que hay una anomalía lo recomendable es ir a un especialista.